MI QUERIDO SUEÑO

Mi querido sueño,

A veces, te llamo anhelo, otras deseo. A veces, te siento muy cerca y otras, sin embargo, muy lejos. Yo sé que tú, por tu naturaleza, estás deseando manifestarte en mi vida y dejar, así, de ser solo un sueño, pero parece que yo no te dejo. Sé que si te considero un sueño, si te deseo tanto es porque, en algún momento, sentí que no te merecía. He aprendido que lo que más deseamos también es lo que más nos asusta, y solo cuando dejamos de tenerle miedo a nuestro sueño, es cuando puede tomar forma y convertirse en algo real.

Seguro que conoces todas las excusas que te he ido poniendo. Que si todavía no es el momento, que si tengo algo que cambiar, que si el Universo a lo mejor quiere otra cosa para mí, que si no me lo merezco, que si tendré algo que sacrificar. Tú eres mi deseo y estás listo para hacerte real, por eso, imagino tu cara de sorpresa al ver cómo te rechazo y, a la vez, te digo que te quiero. Creerás que soy una loca cuando doy vueltas y vueltas en mi mente preguntándome cuándo llegarás. Sé que si pudieras hablar me dirías: estoy aquí desde hace tiempo, haz el favor de abrirme la puerta para poder entrar.

Te pido perdón. Discúlpame por haberte negado, por haber creído que no te merezco, que no soy digna de ti, por haberte dejado durante tanto tiempo en la indefinición, por haberte tenido miedo, por no haberte permitido dejar de ser un sueño y así poder mostrarme todo lo que tienes para mí. Te pido perdón por haberte mantenido separado de mí. Ya no te siento como un sueño, no. Ahora, te llamaría derecho, te diría que representas lo que merezco. Ahora sé que soy digna de ti, y que manifestándote en mi vida, yo soy más libre, más poderosa y más feliz. Ahora te siento, te imagino y te veo, pero no solo eso. Ahora sé que estás aquí, que ya existes y que estoy lista para permitirte y, después, vivirte.

Gracias por recordarme que lo que sueño y deseo puedo manifestarlo. Gracias por tu infinita paciencia, por mantenerte en mi mente, por tu capacidad para darle sentido a la vida, por ser el medio para crecer e ilusionarme. Gracias por dejar de ser un sueño, y convertirte en algo real y tangible.

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.

Photo by Joshua Earle

Photo by Joshua Earle


MERECES

Mereces tener una vida plena y poder manifestar toda tu potencialidad. Mereces sentirte bien, disfrutar y estar paz. Mereces tener un trabajo que te guste y en el que puedas utilizar tus talentos y tus dones. Mereces ser amado y cuidado, escuchado y atendido. Mereces recibir consuelo y apoyo. Mereces tener intimidad. Mereces ser reconocido. Mereces todo el respeto del mundo. Mereces vivir una vida con sentido. 

Mereces ser libre y que el miedo no te atenace. Mereces brillar y dejar de vivir sometido. Mereces poder manifestar todo lo que sueñas y convertirte en creador de tu propia experiencia. Mereces amar y vincularte. Mereces descansar, jugar y disfrutar. Mereces dejar de sacrificarte y de luchar. Mereces todo lo que el Universo desea darte. Mereces los milagros y el bienestar. Mereces la salud plena, la abundancia y toda la prosperidad que puedas imaginar. Mereces una vida llena de oportunidades y vacía de sufrimientos. Mereces sentirte digno e inocente. Mereces, no por lo que haces, sino por lo que eres.

Mereces expandirte y crear. Mereces que tus deseos se hagan realidad. Mereces tener una vida fácil, sentirte seguro y siempre abastecido. Mereces ser escuchado y tratado con cariño. Mereces romance, abrazos, caricias y besos. Mereces vivir consciente y conectado a tu Divinidad. Mereces todo lo bueno y mucho más. Mereces querer y que te quieran. Mereces una vida repleta de experiencias, una vida intensa. Mereces alguien a tu lado capaz de reconocer tu grandeza. Mereces buenos amigos con los que contar. Mereces vivir sin preocupación y sin que tu ego te culpe y te amenace. Mereces toda la felicidad.

Mereces, no por tus sacrificios, tus logros o tus esfuerzos. Mereces por ser parte del Universo, pero si la Fuente desea darte todo lo mejor y tú no estás disponible para recibirlo, entonces el merecimiento pierde todo su sentido. Merecer es sentirte inocente y digno, abierto y receptivo. Es amarte tanto que te permitas vivir como un niño ©

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.

Photo by Alexandros Giannakakis

Photo by Alexandros Giannakakis



LIDERAZGO Y ÉXITO

Convertirse en líder es la elección más trascendente que uno puede tomar: es la decisión de salir de la oscuridad para llegar a la luz.
— Deepak Chopra

El éxito y el liderazgo no tienen que ver con el reconocimiento externo, el trabajo, o el dinero. El verdadero éxito es la consecuencia natural de una vida vivida desde el alma, desde la acción pasiva y conectada a la capacidad de permitir que todo nuestro potencial interno tome forma y se manifieste. Cuando transitamos por esta experiencia con la consciencia despierta, entonces, nos convertimos en personas exitosas. Podemos prosperar y hacer que sea real todo aquello que soñamos y que nos corresponde por derecho propio. Irradiamos luz sin sacrificios ni esfuerzos. Y es en esa luz donde nuestro líder interno, despierta.

Las personas exitosas que lideran desde el alma viven conectadas al significado más elevado de la palabra poder, asumen la responsabilidad de atender y cuidar de sus necesidades y disponen de una profunda consciencia de servicio. Un verdadero líder cultiva la generosidad que, en ningún caso, tiene que ver con lo que se tiene sino con la disponibilidad para compartir todo lo que se es. Ser generoso es ser desprendido, es saber que somos una fuente inagotable de amor y que al dar, recibimos.

Cuando vivimos desde el alma, el éxito y el liderazgo son consecuencias naturales y no buscadas. Por tanto, las experimentamos libres de enganches, dependencias y apegos. Vivir desde el alma implica el reconocimiento y la aceptación de nuestra verdadera naturaleza, saber que somos seres divinos experimentando en un cuerpo físico y los dueños y señores de nuestra vida y de nuestro destino. El verdadero líder deja que su Divinidad gobierne su vida y, por tanto, fluye y confía. Reconoce que es responsable de expandir amor, no le da autoridad al juicio, la queja, el miedo o el desánimo. Las personas que lideran desde el alma aceptan su poder para crear y saben que no son víctimas de nada. Viven libres y en calma.

El verdadero éxito es aquel que nos permite manifestarnos de forma completa y que nos lleva a brillar desde dentro. Liderar desde el alma implica dejar atrás la competencia, la sensación de separación y de ausencia de recursos. Una persona exitosa es optimista, y eso no significa que lo vea todo de color de rosa sino que tiene la certeza de que la vida está de su parte y de que detrás de todas las experiencias se esconden grandes oportunidades. Un líder ha encontrado su luz interna y ha decidido ponerla en servicio. Ha asumido su responsabilidad y su poder. También su libertad y su capacidad para crear y ser todo lo que es.

El éxito y liderazgo espiritual transcienden por completo la competitividad, el ego, el apego, y el deseo de reconocimiento. Son dos formas de servir y de expandir el amor que somos y que habita dentro.

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.

Photo by Miguel Bruna

Photo by Miguel Bruna

RESISTENCIAS

Las resistencias son nuestra manera de negar lo que nos corresponde por derecho propio. Son nuestra forma, casi siempre inconsciente, de rechazar lo que más necesitamos o queremos. A través de ellas, confirmamos que no nos sentimos ni merecedores ni dignos. Las resistencias surgen en nosotros como consecuencia de una profunda desconfianza en el propio fluir de la vida. Desde niños, hemos aprendido, construido o comprado creencias que nos dicen que estamos solos, que, para lograr lo que deseamos, tenemos que esforzarnos mucho y luchar, que “hay que merecérselo”, que “Dios no está para tonterías sino para cosas importantes”, que “todos tenemos una cruz”, que el sufrimiento actual puede tener algún tipo de recompensa posterior o que los otros saben lo que necesitas mejor que tú mismo.

Sobre esas creencias tan limitantes, basamos nuestra forma de relacionarnos con la vida, y es ahí, donde surgen las resistencias. Comenzamos a fabricar una fuerte armadura en nuestro interior para defendernos de esta vida tan difícil y desafiante. Esa armadura nos intenta proteger del enemigo que está ahí fuera, en la enfermedad, en la escasez, en la separación o en cualquier acontecimiento que hemos juzgado como negativo. Entonces, comenzamos a resistirnos, a negarnos, a rechazar, a luchar, a taparnos los ojos ante lo que nos está sucediendo. Y huimos, queremos escapar y que todo pase, y pedimos ayuda a Dios, sin darnos cuenta de que, detrás de absolutamente todas las experiencias por las que transitamos, hay amor.

La realidad es que el Universo Dios siempre está trabajando a nuestro favor, siempre quiere lo mejor para cada uno de nosotros, ¿cómo iba a ser de otra manera si Él solo es amor y Yo Soy Él? El Universo no castiga y tampoco envía pruebas, por tanto, cuando nos resistimos con fuerza a la situación que tenemos delante, cuando luchamos contra ella, cuando nos defendemos con uñas y dientes, estamos negando la posibilidad de descubrir la luz que esconde. Estamos viviendo una vida que, en el fondo, creemos peligrosa. Nadie nos ha dicho que no hay nada ahí fuera, que no somos víctimas, sino todo lo contrario. Nadie nos ha dicho que nosotros somos los co-creadores de nuestra propia experiencia.

Las resistencias no nos dejan fluir, nos impiden descubrir nuestro poder y aniquilan la posibilidad de que el Universo pueda intervenir a nuestro favor porque la resistencia se caracteriza por la persistencia. Porque si yo tengo depositada toda mi atención en resistirme, en rechazar o en negar lo que me está ocurriendo, sin darme cuenta, lo estoy activando y construyendo. Porque allí donde coloco el pensamiento, coloco también la energía, y esa energía es el medio para crear mi realidad. Solo si dejamos de prestar atención, solo si abandonamos la resistencia, solo si el asunto deja de ser un problema, nuestra vida podrá comenzar a cambiar y a mostrarnos nuevas e infinitas posibilidades.

Cuánto más difícil sea la situación por la que estemos atravesando, más necesitamos comprometernos con la entrega, con el fluir y con el dejar ir. Con la aceptación plena y la ausencia total de resistencia. En el momento en el que nos quitamos los guantes de boxeo y decimos: “ok, adelante”, abrimos las puertas del Universo entero. Dejar ir nuestras resistencias implica cultivar la confianza en que la vida nos aprecia y nos quiere. Incluye el sentirnos dignos de todo lo mejor y agradecidos por cada experiencia. Dejar ir nuestras resistencias nos pide que seamos abiertos de corazón y mente, flexibles y que vivamos receptivos y disponibles.

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.

Photo by Metin Ozer

Photo by Metin Ozer


DOY GRACIAS

Doy gracias por estar viva, por existir, por poder disfrutar de esta experiencia. Doy gracias por cada día, por el sol, por el mar, por el aire que respiro y por la naturaleza. Doy gracias por todos y cada uno de los desafíos que me he ido poniendo en el camino, porque aunque sé que son una ilusión, todos me han servido para despertar, cada día más, mi verdadera esencia.

Doy gracias porque siempre soy escuchada y guiada. Doy gracias por los milagros, las conexiones y las constantes sincronías. Doy gracias por todas y cada una de las personas que he atraído a mi vida, por su generosidad, sus enseñanzas y por su ayuda.

Doy gracias por todo lo que tengo, por haber aprendido a disfrutarlo, compartirlo y a no identificarme con ello. Doy gracias por todos los dones y talentos con los que he venido a esta experiencia. Doy gracias por tener miedo, porque cada día me enseña el amor que me falta por despertar dentro. Doy gracias por todos los regalos que me ha dado el Universo: por mi salud, mi prosperidad, mi dicha y mi paz interna. Doy gracias por poder dedicarme a lo que, para mí, no es un trabajo. Doy gracias por poder servir y compartir toda esa información que tengo dentro. Doy gracias por mi intuición, por poder aprender enseñando, y por tener la oportunidad de reinventarme y de cambiar de traje. Doy gracias porque, ante cada crisis que experimento, mi Divinidad se pone a trabajar para sacarme de la oscuridad y susurrarme que nunca olvide que soy Amor y que todo lo tengo dentro.

Doy gracias por mi libertad y por mi poder para crear. Doy gracias por ser sostenida, apoyada y siempre protegida por el Universo, por haber aprendido a aceptarlo y a permitirlo. Doy gracias a mi energía masculina por su capacidad para dar forma a mis sueños, y a mi energía femenina por su poder para recibir y para soñar.

Doy gracias a mi cuerpo, por ser tan perfecto y por mostrarme con tanta claridad las cosas que necesito cambiar. Doy gracias por todos los recursos de los que dispongo, por el dinero y por el alimento. Doy gracias por el regalo más inmenso y poderoso, por venir a esta experiencia con la capacidad de amar y de ser amada, de generar vínculos y lazos, de volver a sentir que no hay cuerpo, que no hay separación, que formo parte del Poder del Universo. Doy gracias por todo lo compartido con las personas que ya se han ido, doy gracias por tener la certeza de que, pase lo que pase, todo está bien. Doy gracias por mis amigos, por tener gente cerca que me quiere y me aprecia. Doy gracias por mi imaginación, porque sin ella no sería capaz de crear con consciencia. Doy gracias por tener una mente libre, por poder elegir en qué pensar. Doy gracias por la capacidad para responsabilizarme de mi vida y de cómo quiero vivirla. Sin duda, mi mayor agradecimiento es, siempre, por mi libertad.

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.

Photo by Chris Liverani

Photo by Chris Liverani


NO LO PERMITAS

No permitas que el miedo te arrastre. No dejes que asuma las riendas de tu vida, no te creas lo que te dice y, por favor, no le des espacio para que te asuste. No olvides que tu miedo solo necesita amor, solo te está pidiendo ayuda. No permitas que la vida pase sin haber hecho todo lo que está en tu mano para cumplirte, para mostrarle al mundo tus dones y tu potencialidad. No te permitas creer que eres pequeño y limitado, nunca pienses que no vas a poder. Ocurra lo que ocurra, recuerda que tú eres un ser divino y sagrado que está paseando por esta vida para expandirse y para brillar.

No permitas que los juicios de los demás te hagan dudar. No permitas que desde fuera te intenten hacer creer lo que no eres. No permitas que sus miedos sean tu verdad, no pienses que si ellos no lo lograron, tú tampoco podrás. No dejes que su falta de fe y confianza te intoxique. No permitas que te hagan sentir pequeño o insignificante. Tú eres valioso, poderoso, e importante.

No renuncies a tu libertad, por favor, no te lo permitas. Tu mente representa tu capacidad para crear. Eres libre de pensar y de ser lo que quieras. No abandones tus sueños ni tus deseos de volar. No permitas que tu libertad se convierta en algo por alcanzar. Vive libre, esa es tu gran responsabilidad. No te sometas, nunca lo hagas, nunca pliegues tus alas.

No te permitas una vida ausente de risas, de juego y de placer. Para, escúchate, hónrate, y descansa. Deja ir el victimismo, el juicio y la falta de fe en ti mismo. Dile adiós a la queja, y a la tendencia a huir de lo que, ahora, te está pasando. No le des poder al pasado, no te enganches a un futuro que todavía no ha llegado. Permítete vivir en el presente, y si no lo consigues, revisa los miedos que te has creído y que no te dejan fluir, soltar y confiar en que, siempre, eres guiado y protegido.

Cree en ti y reconoce todo lo que has logrado. Permítete lo que sientes, llora, grita y haz lo que creas necesario. Escucha tu corazón porque es ahí donde está tu hogar, donde siempre encontrarás refugio, donde todo encuentra su sentido. No te permitas ni un día más sin mirarte, sin reconocerte y sin apreciarte. No vuelvas a elegir lo que no te hace bien, no te hagas daño. Tú mereces todo lo mejor, jamás deberías olvidarlo.

Permítete la vida que sueñas, recuerda que solo tú eres su creador.

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.

Photo by Nicholas Sampson

Photo by Nicholas Sampson

CAMBIO DE NODOS LUNARES

En enero de 2019 y durante todo este año, he compartido contigo información sobre el eje nodal Cáncer-Capricornio. El próximo martes, y después de 18 meses, los Nodos lunares abandonan Cáncer-Capricornio e ingresan en el eje Géminis (Nodo norte)-Sagitario (Nodo sur) donde permanecerán hasta febrero de 2022.

Los Nodos lunares son unos puntos matemáticos en los que se une la eclíptica solar y la órbita de la luna y que representan nuestra evolución. El Nodo Sur o cola de dragón simboliza nuestra zona de drenaje o eliminación, lo ya conocido y que, de alguna manera, deberemos dejar atrás para dirigirnos hacia el Nodo norte o cabeza de dragón, que representa ese proceso que nos es desconocido y que nos servirá en nuestro camino de evolución. 

Transitamos por una etapa de profunda transformación en la que las viejas y caducas estructuras están derrumbándose y como humanidad, hemos tenido la oportunidad de integrar la esencia de las cualidades energéticas representadas por Cáncer (hogar, nutrición, vínculos, vulnerabilidad, atención a lo que sentimos e interiormente necesitamos),y de limpiar, purificar y transformar las cualidades representadas por Capricornio (responsabilidad, estructuras, límites, autoridad, el "deber ser", el "tengo que"). 

El nodo sur en Capricornio nos ha llevado a transformar y a dar muerte a la energía más baja de este proceso, a esa tendencia a cargar con responsabilidades que no nos corresponden, a sostener viejas y caducas estructuras que, únicamente, responden al miedo a ser los constructores de nuestra propia vida. La rigidez, el “tener que”, el “deber ser”, el responder a expectativas externas, a lo que se espera de nosotros, el sostenimiento de estructuras no vinculadas con nuestras necesidades más personales han sido y todavía son los procesos por los que estamos transitando. En estos meses hemos descubierto que no podemos renunciar a nuestras necesidades en beneficio de necesidades que nos son ajenas, que no podemos entregar nuestras decisiones a autoridades externas, que necesitamos asumirnos y reconocer el amor que se esconde detrás de un “no”. Hemos descubierto que nuestra responsabilidad es hacia dentro y no hacia fuera. Hemos aprendido que lo externo debe de ser el resultado del amor y del respeto hacia nosotros mismos y hacia lo que sentimos.

El Nodo norte en Cáncer nos ha invitado a convertirnos en nuestra propia madre, a sostener lo que sentimos, a aceptar nuestra vulnerabilidad y nuestras necesidades, a transformar nuestro hogar interno en una fortaleza. Cáncer y Capricornio nos han llevado a acercarnos más a los vínculos, a reconstruirnos por dentro, a entrar en contacto y conexión con el poder que habita dentro de nosotros y a abandonar y dejar caer todas aquellas estructuras ya obsoletas y caducas que no son reflejo y no dan respuesta a los cambios generados internamente. Nos han mostrado lo poderoso de responsabilizarnos de nuestras necesidades y de convertirnos en padres y madres de nosotros mismos. 

Esta semana, y durante los próximos 18 meses, iniciamos un nuevo camino de evolución, que nos indica nuestra dirección de evolución (Nodo norte en Géminis) y la crisis y transformación de la estructura sagitariana (Nodo sur en Sagitario): veremos como dogmas, filosofías, ideologías y sistemas de pensamiento basados en viejos paradigmas irán transformándose al mismo tiempo que vayamos cambiando nuestras creencias y lo que da, de verdad, da sentido y significado a nuestras vidas. El Nodo norte en Géminis nos dirige por un camino de apertura mental, flexibilidad y consciencia de que no existen verdades absolutas.

Un abrazo,

​Almudena.

Photo by Anderson Rian

Photo by Anderson Rian