SI NO
Si no permito el odio que siento, nunca podré ver el amor en el que habito.
Si prohibo mi tristeza, jamás sentiré profunda alegría.
Si niego que a veces me invaden los celos y que no me fío, también le digo no a la capacidad que tengo para confiar en mí, en ti y en la vida.
Si decir no y poner límites me asusta, entonces permaneceré ciega al poder de mi autoridad interna.
Si me resisto a mis propias resistencias, seré incapaz de fluir y de andar en la misma dirección que camina la vida.
Si no puedo reconocer que no sé, será imposible que algún día descubra mi sabiduría.
Si no dejo que mi vulnerabilidad hable, entonces, irremediablemente, le estaré diciendo a mi poder personal que se calle.
Si no abrazo la falta de fe en mí, jamás podré tener fe en la vida.
Si no quiero ser quien de verdad soy, únicamente proyectaré que soy mentira. Nunca sabré que ser yo mismo es el camino para alcanzar la plenitud en mi vida.
Si digo no a tu abrazo, me incapacitaré para saber dártelo.
Si impido y si no acepto mi miedo, no me liberaré de la muerte y no podré vivir la vida que tengo.
Feliz presente.
Almudena Migueláñez