OSCURIDAD

"Prefiero ser un hombre completo a un hombre bueno". Carl Jung

Huyes de tu oscuridad sin saber que es ella la que alberga tu luz. Pretendes ocultar tu imperfección sin saber que es ella la que abre las puertas de tu perfección. Crees que puedes mentirte y correr más rápido que tú.

No quieres una parte de ti. Rechazas tu soberbia, tu necesidad de control, tu tendencia a la queja, tu llanto, tu tristeza. Reniegas de tu miedo y deseas expulsarlo de tu reino. "No quiero ser así". Dices que tú lo que buscas es crecer, que quieres sentirte bien, que por eso trabajas, porque quieres ser mejor, pero en realidad lo que deseas, a veces sin saberlo, es deshacerte de una parte de ti, y eso, sin duda, es un grave error.

Creíste que hay algo de malo dentro de ti. Tú, como yo, hemos aprendido que hay que ser buenos, que hay que amar al prójimo, que el deber es antes que el ser, que la rabia, el odio o el rencor no nos hacen dignos, que la tristeza es mejor evitarla y que las lágrimas de nuestro propio llanto siempre hay que guardarlas. Tú, como yo, hemos aprendido a ocultar. Nos hemos hecho maestros en llevar una parte de nuestro ser, la que pensamos que no sirve, a la oscuridad. 

Y allí, en nuestras propias tinieblas, algo de nosotros se va oscureciendo cada día un poquito más. Una parte de nuestro ser que ha sido juzgada y sentenciada por fea, por indigna, por nefasta y que hemos dejado sin la más mínima posibilidad de perdón, sin derecho a una defensa y sin ninguna compasión. Una parte de nosotros que grita desde la oscuridad, que se proyecta en el otro y que anhela un poco de amor.

¿No te das cuenta de que eres tú, a través del juicio que emites contra ti, el que se impide ser feliz? ¿no te das cuenta de que eso que rechazas, eso que llamamos "sombra", forma parte de ti? ¿no te das cuenta de que sin ella no eres completo y que es la única que te puede mostrar tu luz?

Dime una cosa, o mejor dítela a ti: ¿qué es lo que no quieres que nadie vea y que mantienes escondido dentro de ti? ¿por qué lo rechazas? ¿Cómo te sentirías si te permitieras mostrarlo, dejarlo ser? ¿Cómo te sientes al aceptar que sí, que eso forma parte de ti? 

Aceptar total y completamente aquello que llevaste a la oscuridad, que juzgaste y de lo que renegaste, te da serenidad, plenitud, amor y mucha paz. Es tu oscuridad la que alberga tu luz.

Feliz presente,

Almudena Migueláñez.