UN ÚLTIMO PENSAMIENTO

UN ÚLTIMO PENSAMIENTO

Pensaba en un último pensamiento antes de irnos de vacaciones y pensaba también que después de todo lo escrito en estos meses, quizá lo que más me gustaría es recordarte que escondido detrás de tu miedo, latente a la espera de que decidas quitarte todos esos trajes, olvidado entre tus preocupaciones, tus culpas y tus inseguridades, solo existe el amor que eres, el amor de donde provienes:

En el amor no hay palabras. El amor es silencio.
En el amor no hay lucha, no hay esfuerzo ni sacrificio porque el amor es aceptación.
En el amor no hay deseo, no hay condición, no hay necesidad. El amor es incondicional.
En el amor no hay posesión ni pertenencia. El amor es libertad.
En el amor no hay intentos de. El amor es respeto.
En el amor no hay elección, no es a él sí pero a ti o a ella no. El amor no tiene límites.
En el amor no hay error, no hay fallo ni vacío porque su única condición es la perfección.
En el amor no hay sombra, no hay velo, no hay oscuridad. El amor es la luz.
En el amor no hay ego. El amor eres tú.
En el amor no hay miedo. El amor solo ve amor.
En el amor no hay ruido. El amor es el corazón.
En el amor no hay trajes, no hay falsedad, no hay mentira. El amor es la verdad.
El amor no se logra ni se alcanza. El amor ES la naturaleza del ser.
En el amor no hay dudas, no hay desconfianza. El amor es la fe.
En el amor no hay culpa ni separación. El amor es compasión.
En el amor no hay enfrentamiento, no hay razón. El amor es humildad.
En el amor no hay queja ni rencor. El amor es gracia y perdón.

Almudena Migueláñez